Sólo una diferente en el transcurso, solo. ¡Silencio! No puedo pensar... ¡basta! Subí tan rápido como pude...
El ático no es una sala de espera, es sólo un gran baúl. Tomar un vestuario viejo podrá no ser diferente pero al menos combina con el polvo del ático. Di tres pasos y quité una puerta, alguna vez debió haber sido, o una mesa, o escenario de una guerra de comida. Aun así no es diferente, detrás, detrás hay una maleta, probablemente tiene alguna rata muerta dentro o tal vez un sombrero de copa, de cualquier manera no pienso abrirla; se añejará, como la botella de sidra con fecha de 1958 que yace a su lado.
¿Es una sorpresa encontrar que tu propio ático es increíblemente parecido a tu mente, a cómo se pone en piloto automático justo antes de caer dormida? No realmente; al pensar en mi ático siempre pienso en un gran baúl lleno de ideas, recuerdos, memorias vivas pero ancianas.
El sótano por el contrario, no es un baúl en absoluto. Es sólo mi cueva personal. Tiene el mismo olor a viejo del ático pero mezclado con humedad y el hecho de que está vacío excepto por algo de chatarra, de cuando alguna vez fue un billar/bar y cuando era un lugar para fiestas clandestinas de halloween. Yo la llamo la 'cueva de la amnesia'... Aquí salen a burlarse de mi los recuerdos y conceptos que no puedo alcanzar por más que estire la conciencia hacia el fondo de mi cráneo. Alguna que otra vez creo poder verlos, pero es sólo una cucaracha de cueva rozando mi pie, un paso más y puedo escuchar algo de vidrio crujir. Se siente la humedad y el calor, pero se siente más la falta de oxigeno; que curiosamente te hace sentirte más pesado de lo que eres.
Fantasmas perseguidos: N/D. Fantasmas encontrados: 0. Mejor suerte para la próxima.
Dos pisos arriba, en mi recámara. El año inicia... pero la búsqueda, parece no tener fin. Aún tengo que buscar en baúles y sótanos del mundo exterior.
-Adrián Martínez
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